En Tucumán, nosotros los vemos morir

La comunidad del Hospital del Niño Jesús de Tucumán, a los ciudadanos de este país:
Los graves errores cometidos por las personas o grupos de personas que tomaron decisiones desde los años sesenta hasta la fecha, provocó que Tucumán se transformara de jardín de la República en la Biafra Argentina. Tal vez todo comenzó con el cierre de los Ingenios azucareros en el 66, sin ninguna planificación para una inmensa masa de personas desocupadas que arrastraron a su familia a la exclusión. Las políticas económicas, sociales, y sanitarias nunca fueron diseñadas para contener a estos seres humanos, que perdían la dignidad del trabajo, el beneficio de la educación y el derecho de una vida sana.
El hospital de Niños denunció los aberrantes casos de desnutrición, que por segunda generación a aparecieron en los años 1982-1983, también lo hicimos en el abarrotamiento de pacientes por meningitis y desnutrición en el año 1996, y siempre dimos una respuesta como lo venimos haciendo anualmente durante los brotes de enfermedades respiratorias en el invierno y deshidratación en el verano. Siempre los vimos tomar decisiones equivocadas, también vimos morir a los niños.

Con la creación del Sistema Provincial de Salud creímos que se iniciaba una nueva esperanza en salud, pero a poco de andar, nuevamente se tomaron decisiones equivocadas, que hizo que un buen proyecto terminara convertido en una estructura burocrática vacía de contenido, con escasa capacidad de resolución ante la crisis. Por último la desarticulación del funcionamiento del sistema y la prácticamente eliminación de los agentes sanitarios, producido por el anterior gobierno, termino de destruir nuestras ilusiones.

*Hoy nos encontramos con CAPS y hospitales del interior vaciados.
*Programa de Atención Primaria de la Salud que no funciona.
*Falta de recursos humanos y materiales.
*Nunca un concurso
*Nunca una evaluación
Hoy el mundo se entera que en Tucumán los niños se mueren de hambre, que el hospital de Niños está superado en la capacidad operativa, que la red sanitaria no funciona y que la indigencia no tiene respuesta.
Por todo esto el Hospital de Niños de Tucumán dice: " BASTA YA"
Y otra vez, "otro OPERATIVO" ("Operativo Independencia", "Operativo Tucumán".....), este último "OPERATIVO" RESCATE.
Nuevamente otros toman las decisiones.
SOMOS CONSCIENTES QUE UNA EMERGENCIA, ninguna ayuda DEBE SER RECHAZADA, pero cuando usted se vaya Sra. de Duhalde dentro de 30 días nuestros niños desnutridos y sus familias:
1) ¿Podrán beber agua potable?
2) ¿Podrán tener cloacas?
3) ¿Podrán tener una vivienda digna?
4) ¿Podrán estudiar en una escuela pública y gratuita?
5) ¿Podrán dejar de comer sobras de los basurales?
6) ¿Podrán dejar de trabajar mendigando en los semáforos?
7) ¿Podrán dejar de juntar cartones y desechos de los tachos de basura?
En síntesis ¿podrán tener un futuro?

Sra. de Duhalde, con los mismos recursos que se pagara a la numerosa comitiva que Ud. trae, se podrían pagar médicos, enfermeras, agentes sanitarios, trabajadores sociales, que ya están en Tucumán que conocen el terreno, muchos de estos trabajando en el sistema y que no cobran dinero alguno, médicos de cabecera, agentes sanitarios, Árbol 2, médicos concurrentes y contratados, médicos residentes ad honorem, enfermeras que trabajan por BAC, que pueden desarrollar esta tarea con la misma o mayor eficiencia con el beneficio de dejar una sola vez una estructura permanente que beneficia a la comunidad.
Porque si esto ocurre seguiremos viéndolos morir, mientras otros, nuevamente, tomaron las decisiones.
Fuente: Comunidad del Hospital de Niños Jesús de Tucumán